Donante: R4D Programme – Swiss National Science Foundation, Vontobel Foundation, Geigy Foundation

Socios en Guatemala: Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, Ministerio de Alimentación y Ganadería, Concejo Releb’aal Saq’be’, COCODES Poptún

Investigadores Asociados: Dra. Mónica Berger, Lic. David Morán (Unidad de Zoonosis CES)

Las enfermedades zoonóticas continúan amenazando las economías de los países de todo el mundo debido a su potencial de brote. Este proyecto tiene como objetivo promover un enfoque de Una sola salud para desarrollar una prueba de concepto de vigilancia y respuesta en la región de Petén de Guatemala que pueda probar mecanismos metodológicos novedosos para su posterior replicación en el país.

La investigación en curso en todo el mundo sobre las enfermedades zoonóticas muestra la importancia percibida que tiene por sus impactos en la salud y la economía, un tema importante en la agenda de desarrollo por la carga que representa para muchos países de ingresos bajos y medianos. Hay muchos patógenos tropicales desatendidos en Centroamérica, de los cuales la mayoría son zoonosis que pueden tener graves consecuencias en poblaciones ya empobrecidas. En Guatemala se estima que los brotes de origen zoonótico pueden representar hasta el 60% de la morbilidad en las poblaciones urbanas que tienen acceso a los centros de salud oficiales, pero se sabe poco de la carga en las áreas rurales donde la mayoría de la población es de origen maya con índices de desarrollo humano extremadamente bajos. Algunos estudios preliminares han identificado una presencia importante de leptospirosis, salmonelosis, tuberculosis, cisticercosis y leishmaniasis circulantes en poblaciones humanas y animales, así como patógenos emergentes como Borrelia, Bartonella y Rickettsia. Se han identificado otros patógenos como el hantavirus, el virus de la viruela y la Yersinia en países adyacentes, pero no existen datos para Guatemala.

Este proyecto intenta llenar la brecha de enfermedades zoonóticas desconocidas que afectan a las poblaciones rurales en áreas con bajo acceso a los servicios oficiales de atención médica, y comprender los modelos explicativos mayas emic locales para estas enfermedades y así respaldar la correlación con los modelos biomédicos. En los últimos años, la colaboración de la salud humana y animal, denominada Una Salud, ha cobrado impulso. En Centroamérica, sin embargo, el enfoque de una sola salud es mayormente desconocido y los sectores oficiales de salud continúan funcionando de manera desconectada. Este proyecto es el primero en Guatemala en emplear este enfoque al fomentar la colaboración entre los Ministerios de Salud Humana y de Producción / Sanidad Animal, y se espera que muestre los beneficios para mejorar la salud humana y animal, aumentar la cobertura y reducir costos. Este proyecto también intenta crear una metodología validada para vigilancia sindrómica basada en la comunidad en poblaciones rurales de habla maya, con una aplicación de interfaz de tecnología móvil culturalmente apropiada. Esto nos permitirá recolectar muestras e identificar amenazas para la salud en tiempo real. Para traducir los resultados de la investigación en políticas y programas apropiados, el proyecto se organiza como un proceso transdisciplinario, que involucra a múltiples partes interesadas de la ciencia, el gobierno, las comunidades y el sector privado. Este proceso de colaboración partió de la definición conjunta del problema, continuando hasta la coproducción de nuevos conocimientos destinados a encontrar soluciones a las amenazas a la salud pública en la región.